Experiencia Gastronómica en Atenas Playa: Sabores, Vistas y Ambiente Únicos

Experiencia Gastronómica en Atenas Playa: Sabores, Vistas y Ambiente Únicos

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Nuestra última incursión en el mundo gastronómico, aunque no marcada por la etiqueta de «primera vez», fue una maravillosa inmersión en la magia que ofrece la playa de La Barrosa, justo al lado de la Torre Bermeja, en el restaurante Atenas Playa.

 

             

 

No es la primera vez que nos dejamos llevar por la experiencia de este lugar. Años atrás, conocimos su versión inicial, un chiringuito playero también llamado Atenas, escondido bajo el Hotel Riu, casi al final de la playa de La Barrosa,  muy cerca de las calitas de Roche.

Lo asombroso es que el restaurante actual conserva la esencia del antiguo chiringuito donde la comida era excelente, y el ambiente, ese que todos buscamos en nuestras playas, se disfrutaba muchísimo. Su actual ubicación hoy día es aún mucho mejor, mejorando cualquier expectativa, ya que se ha convertido en un reconocido «Beach Club» que no solo ofrece vistas espectaculares y atardeceres de ensueño, sino también una piscina rodeada de hamacas y camas balinesas que te hacen sentir en el paraíso.

 

                                                       

Este lugar va más allá de un simple restaurante, ofreciendo una amplia gama de servicios donde cada detalle cuenta. Desde la comida hasta el ambiente y la música, todo está cuidadosamente pensado.

Sin más preámbulos, quiero destacar que la propuesta gastronómica es excepcional. Combinan tradición y vanguardia en cada plato, mimando sabores y productos locales de alta calidad. La carta es tan amplia que los indecisos y los amantes de la buena comida como yo nos vemos ante un dilema delicioso.

Antes de entrar en los manjares, un buen vino, por supuesto. Optamos por un Rioja, «Campo Viejo», un blanco semidulce afrutado, fresco y goloso, perfecto para cualquier momento.

La experiencia culinaria comenzó con una ensaladilla de pulpo que realmente destacaba por su sabor espectacular y la mayonesa ligera, rematada con un toque de pimentón que la elevaba al cielo.

 

 

Las zamburiñas gratinadas con mayonesa Kimchi y toque de lima llegaron a continuación, y aún estoy saboreando la deliciosa combinación. La lima rallada sobre el gratinado era simplemente celestial.

 

Como plato fuerte, nos conquistaron con un canelón de rabo de toro XXL con queso gouda. La carne suelta, jugosa y llena de sabor, mezclada con el queso, nos dejó encantados.

 

 

Y, por supuesto, no podíamos concluir nuestra experiencia sin un toque dulce. Optamos por unos sorbetes de limón con cava, frescos y cremosos, que fueron el broche perfecto para una comida que nos dejó más que satisfechos.

En resumen, Atenas Playa no solo es un lugar para comer; es una experiencia que fusiona la buena comida, el ambiente relajado y las vistas espectaculares. ¡Un rincón gastronómico que sin duda merece una visita!